Que Dios nos coja confesados

¿Qué es la democracia? Simplemente es el gobierno del pueblo.No importa cuan equivocado se encuentre éste. No importa, porque las decisiones las toma la mayoría. La historia peruana, nos ha enseñado que para elegir un gobernante, siempre ha primado la pasión y los intereses de aquellos que quieren evitar que el país salga del subdesarrollo y atraso económico, político y social. En estas ultimas elecciones el odio de un escritor se unió al circo electoral en el Perú. Asi como vimos y oimos a este señor desde su cómodo hogar en España alinearse con Humala, así lo queremos ver cuando el país este hecho un desastre. Queremos ver al conde o marqués y a su digna  nobel familia, vivir aquí. En el país donde realmente las "papas quemarán".

El Perú provinciano y  rural, siempre ha sido el mas olvidado en los diferentes gobiernos. A pesar de lo avanzado en cuanto a la centralización a través de la regionalización, esta situación de abandono no se ha podido superar. La gran mayoría de las regiones reciben ingentes cantidades de dinero gracias al canon minero. Sus autoridades no saben invertir en obras que le deje beneficios a su región. Pero, si podemos ver, como se hacen grandes esculturas con el rostro del presidente regional o alcalde y en honor a algún alimento tradicional de su pueblo. El poblador rural, aún cree que el Estado es quien le debe atender y entregar lo mínimo indispensable para seguir viviendo, tal  cual, lo ha hecho toda su vida. Nuestra realidad sigue siendo de dependencia en todos sus aspectos. La consecuencia es la manipulación de gente que es fácil de convencer, a quienes les dicen que nada debe de cambiar porque les afectaria a ellos. Que el desarrollo es el demonio y que se tiene que luchar contra el. Ejemplos tenemos a montón, pero los mas actuales los tenemos en Tía María y Puno.

El Estado, en  ésta última década, se ha encontrado atado de manos. Sin poder responder ante el ataque de las ONGs a toda oportunidad de crear riqueza en las diferentes regiones del país, especialmente en nuestra serranía. Cuando se quiere reformar una educación paupérrima para transformarla en una de gran calidad, nos encontramos con la oposición de un SUTEP desfasado y anacrónico. Cuando se quiere crear trabajo por medio de la minería, aparecen los adalides de la  justicia y los preservadores del medio ambiente a soliviantar al pueblo y obstruir su propio polo de desarrollo.

Este es el origen del resentimiento del poblador provinciano y rural. Autoridades corruptas con ansias de poder y ambiciones desmedidas é instituciones como ONGs cuyo fin es el de obstruir el desarrollo. Estas son las bases en que se sustenta este odio popular a todo lo que tenga que ver con el bienestar económico y social del país. Mientras se mantenga estas dos lacras dentro del pueblo peruano, seguiremos votando por personajes oscuros y malintencionados como lo es hoy Humala. ¡Que Dios nos coja confesados!.

Posted in: Política